La Estrella de Mar
Cuentan que una vez un hombre mayor caminaba por la playa contemplando el mar, cuando a lo lejos vio la figura de un hombre que parecía bailar.
Se apresuró para acercarse más a esa persona y ver exactamente lo que hacía.
Cuando se acercó se dio cuenta de que no estaba bailando sino tomando estrellas de mar y arrojándolas mar adentro tan fuerte como podía.
Le preguntó entonces: "¿Qué haces mi joven amigo?", éste respondió:
"La tarde está cayendo y la marea bajando, si no arrojo estas estrellas al mar morirán, así que las estoy enviando dentro del mar otra vez".
El hombre mayor sonrió irónicamente y le dijo: "Pero hay miles de playas en todo el mundo, donde miles de estrellas de mar morirán. ¿Crees tú que con eso harás alguna diferencia?".
El joven se detuvo por un momento, suspiró, tomó otra estrella; la arrojó y dijo: "Bueno, acabo de hacer una diferencia para esa!".